El Consejo Social de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), un cuerpo integrado por los municipios de la región, el gobierno provincial y representantes del campo sindical, social, científico y universitario –entre ellos, el CONICET La Plata–, acaba de difundir un informe sobre la situación de los sitios de distribución de alimentos (SDA) del Gran La Plata durante el segundo semestre de 2025. El documento es una actualización de un relevamiento realizado en 2024 en base a datos aportados por las organizaciones sociales vinculadas al Consejo, y fue realizado, además, con el aporte del Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales (IdIHCS, CONICET-UNLP) y la Secretaría de Redes de Salud de la Facultad de Ciencias Médicas (FCM, UNLP) que coordinó y llevó a cabo el trabajo de campo.
El objetivo del muestreo es contribuir a identificar las principales problemáticas alimentarias actuales que tienen lugar en los comedores, merenderos y ollas populares, espacios que responden con al menos un servicio por semana a la demanda alimentaria de familias e individuos que no pueden acceder a una alimentación diaria por sus propios medios. El propósito del informe es también aportar al diseño y puesta en marcha de políticas públicas en la temática.
Según los datos relevados, se ha profundizado la situación negativa registrada en 2024, destacándose las dificultades de acceso a alimentos e insumos para cocinar, aumento de la demanda y disminución de días de prestación de los servicios. Dada la disminución de recursos tanto de alimentos como de retribución al trabajo de quienes realizan actividades vinculadas a la prestación alimentaria, numerosos SDA han cerrado sus puertas, mientras que aquellos que se mantienen en funcionamiento se ven obligados a dar respuesta a una mayor demanda con la misma cantidad de recursos, acudiendo a diferentes estrategias como la disminución de la cantidad y calidad en los servicios brindados y/o días de atención o la entrega de alimentos sin elaborar.
Desde el equipo de trabajo subrayan que las políticas provinciales y municipales de atención alimentaria hacia los SDA no alcanzan a compensar el recorte de las políticas asistenciales del Estado Nacional, lo que deriva en el incremento de la insuficiencia de los alimentos recibidos y utilizados tanto en cantidad como en diversidad. “En relación a esto, es imprescindible plantear el impacto de la falta de acceso a alimentos en cantidad y calidad adecuadas en los diferentes grupos etarios, dado que la malnutrición por déficit resulta un problema de salud pública en Argentina, afectando a personas de todas las edades”, remarcan.
Otros aspectos abordados en el informe son el sistema de dinero mediante tarjetas, como el Fortalecimiento Alimentario a Espacios Comunitarios (FAEC) de la provincia de Buenos Aires y la Tarjeta Alimentar Platense de la Municipalidad de La Plata; y el estado de precariedad de los espacios de funcionamiento de los SDA. Con todo, el equipo concluye en que “resulta indiscutible que el derecho a una alimentación saludable se encuentra vulnerado”.
Para conocer el informe completo, se debe hacer click en este enlace.