COVID-19

El CONICET La Plata y la UNLP ya procesan 800 muestras diarias de casos sospechosos de coronavirus

Distintas dependencias de ambas instituciones pusieron al servicio sus instalaciones, equipos y personal para el diagnóstico de COVID-19


El CONICET La Plata y la UNLP ya procesan 800 muestras diarias.

Apenas desatada la emergencia sanitaria y la medida de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), algunos espacios del CONICET La Plata en coordinación con la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires se organizaron contrarreloj para contribuir con su conocimiento y trabajo a la lucha contra la pandemia, orientando también sus líneas de investigación a la búsqueda de soluciones concretas. Así, a mediados de abril comenzaron a llegar los primeros hisopados a las Unidades Ejecutoras (UE) que habían ofrecido su capacidad para el procesamiento de muestras de casos sospechosos de COVID-19. En consonancia con el avance de los contagios, el número de testeos también fue aumentando, y hoy son alrededor de 800 las muestras provenientes de distintas regiones bonaerenses que se analizan por día entre los ocho centros e institutos involucrados en la tarea, cifra que, vale destacar, acumulaba un total de 20 mil hasta mediados de julio.

El análisis de las muestras se realiza según la siguiente distribución diaria: unas 50 en la Facultad de Ciencias Veterinarias (FCV, UNLP) a cuyo procesamiento se aboca personal del Instituto de Genética Veterinaria “Ing. Fernando Noel Dulout” (IGEVET, CONICET-UNLP); entre 350 y 400 en el Laboratorio de Vacunas Salud (VacSal) del Instituto de Biotecnología y Biología Molecular (IBBM, CONICET-UNLP); y alrededor de 55 en los tres espacios ubicados dentro de la Facultad de Ciencias Médicas de la casa de altos estudios, es decir el Centro de Investigaciones Cardiovasculares “Dr. Horacio E. Cingolani” (CIC, CONICET-UNLP), el Instituto de Investigaciones Bioquímicas de La Plata “Profesor Doctor Rodolfo R. Brenner” (INIBIOLP, CONICET-UNLP), y el Centro de Endocrinología Experimental y Aplicada (CENEXA, CONICET-UNLP-asociado a CICPBA.

Asimismo, como parte del Laboratorio de Salud Pública de la Facultad de Ciencias Exactas (FCE, UNLP), el Instituto de Estudios Inmunológicos y Fisiopatológicos (IIFP, CONICET-UNLP), el Centro de Investigaciones en Fermentaciones Industriales (CINDEFI, CONICET-UNLP), y nuevamente el IBBM participan en el procesamiento de otras 300 muestras. Cabe mencionar que, aunque con distintas técnicas, en todos los casos se realiza el test de referencia para identificación molecular de SARS-CoV-2, denominado RT-qPCR (Reacción en Cadena Polimerasa cuantitativa, por sus siglas en inglés) que funciona buscando un fragmento del material genético del microorganismo patógeno, en este caso el coronavirus. Lo que se analiza es un hisopado de las fosas nasales o el fondo de la garganta del paciente, y arroja resultados altamente confiables en pocas horas, permitiendo detectar la presencia del virus en etapas tempranas de la infección.

“El porcentaje de positividad de las muestras ha ido aumentando semana a semana, hasta alcanzar entre el 30 y el 60 por ciento”, señala Martín Rumbo, investigador del CONICET y director del IIFP, y agrega que entre todas las actividades que se llevan adelante –recepción del material biológico, procesamiento, análisis, elaboración y carga de informes finales– hay unas 25 personas abocadas por completo a este trabajo entre los laboratorios VacSal y de Salud Pública. En este último, a su vez, también se hicieron tareas de validación de otras metodologías de diagnóstico desarrolladas por distintos grupos de investigación del país. Las mismas labores en los centros del ámbito de medicina involucran a otros 16 profesionales.

Con respecto a los desafíos que conlleva este trabajo, Rumbo apunta, por un lado, a los cuidados especiales que requiere el equipamiento y su manipulación como así también a la propia protección del personal, altamente capacitado para llevarlo adelante. Por otro, enfatiza que “el elevado uso de insumos obliga a mantener una logística de permanente reposición a cargo de distintas estructuras a cargo de todas las instituciones involucradas”.