Unos cien productores cerveceros se capacitaron en el CONICET La Plata

En un claro ejemplo de la posibilidad de transferencia del conocimiento científico al conjunto de la sociedad, alrededor de un centenar de productores de cerveza artesanal de nuestra ciudad se dieron cita en el Centro Científico Tecnológico CCT CONICET La Plata para participar de las charlas y cursos ofrecidos por Ciencia y Cerveza, un evento itinerante surgido en 2017 por iniciativa del Instituto Andino Patagónico de Tecnologías Biológicas y Geoambientales (IPATEC, CONICET-UNCo) y el Centro Científico Tecnológico CCT CONICET Patagonia Norte que ya ha recorrido más de diez provincias.

Durante la apertura del ciclo en la sede local del organismo de ciencia, su directora Pilar Peral García aseguró sentirse “orgullosa de ser una de las entidades en recibir a la actividad”, y resaltó que “estamos mostrando que existe la posibilidad de una relación entre empresas, PyMES y asociaciones con investigadores científicos que les pueden transferir lo que saben. La verdad es que la ciencia está avanzando para fortalecer el nexo con esos actores”. A su turno, el intendente de La Plata Julio Garro felicitó a los productores presentes por el trabajo que realizan y especialmente “por la pasión, el fanatismo y el sentido de pertenencia con que lo hacen”, al tiempo que enfatizó su apoyo y disposición permanente para con el sector.

Por último, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Provincia de Buenos Aires Jorge Elustondo puntualizó que “el conocimiento y la tecnología generados constituyen un activo muy fuerte que le pertenece a la sociedad y eso no siempre se ve. La realidad es que para cada uno de los problemas que tenemos, el sistema científico tiene una respuesta”. Cabe mencionar que el investigador del CONICET en el IPATEC y referente de Ciencia y Cerveza, Diego Libkind, agradeció la bienvenida y destacó que hasta el momento en ningún otro lugar el evento había contado “con el acompañamiento y la presencia de tantos funcionarios de jerarquía”.

Comenzada la actividad, se dio paso a un espacio llamado “CONICET se vincula” destinado a mostrar casos de articulación entre el sector científico-tecnológico y el productivo, cámaras empresariales, organismos públicos, entre otros. En la edición local, el segmento estuvo representado en primer término por Alberto Scian, investigador del CONICET y director del Centro de  Tecnología de Recursos Minerales y Cerámica (CETMIC, CONICET-CICPBA), quien contó acerca de una avanzada línea de estudio para utilizar el residuo de la industria cervecera en la fabricación de ladrillos en reemplazo de otras materias orgánicas –necesarias para lograr ciertas propiedades en el proceso de secado– más difíciles de conseguir.

En segundo lugar, desde el Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (CIDCA, CONICET-UNLP-CICPBA) la becaria Paula Bucci expuso sobre el desarrollo de barras de cereal también a partir del residuo que deja la producción de cerveza y que, como en este caso, puede ser un gran aliado nutricional por su alto contenido de fibras. Nacido en el marco de una convocatoria lanzada por la cervecería Quilmes, el producto –cuya elaboración se sigue mejorando– ha resultado también ser muy beneficioso para personas con diabetes.

Ciencia y Cerveza continuó con el dictado de cinco cursos: Levaduras cerveceras y su manejo en fábricas (parte I y II); Reutilización de levaduras; Microscopía Cervecera: Control de Calidad de Levaduras en Fábrica; y Contaminantes Cerveceros y su Control en Fábricas. Cabe mencionar que los dos últimos tuvieron lugar en un laboratorio de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata (FCE, UNLP). Además de los organismos nombrados, la edición local del ciclo contó con el apoyo de la Asociación de Cerveceros Artesanales Platenses (ACAP), Cerveceros de Berisso, e Islas Malvinas Asociaciones de Cerveceros Artesanales (IMACA).