En un acto que tuvo lugar en el Centro Científico Tecnológico CCT CONICET La Plata encabezado por la directora de la institución Pilar Peral García, el CONICET firmó tres convenios para el desarrollo y aplicación de un sistema de remoción de microorganismos patógenos de agua denominado Filtro de Arena Lento (FDAL) en tres distritos de la provincia de Buenos Aires. Los acuerdos fueron establecidos con los municipios de Bragado y General Belgrano, y con el Consejo Escolar de La Plata.
Además de Peral García, de la rúbrica participaron el coordinador de la Unidad de Administración Territorial (UAT) del organismo, Carlos Rando; el investigador adjunto del CONICET en el Centro de Tecnología de Recursos Minerales y Cerámica (CETMIC, CONICET-CICPBA) Pablo Arnal – que estará a cargo del equipo que trabajará en la implementación del proyecto-; y los representantes de los distritos firmantes: Héctor Gatica y Osvaldo Dinápoli, intendentes de Bragado y General Belgrano, respectivamente, y el presidente del Consejo Escolar de La Plata Damián Birocho.
El proyecto a desarrollarse durante los próximos tres años ya cuenta con un antecedente reciente, ya que en febrero del corriente se firmó un acuerdo similar con el municipio de Magdalena. Según se prevé, la primera etapa consistirá en un análisis de la calidad del agua en escuelas desconectadas de la red pública, luego se probarán los filtros en aquellas que registren niveles altos de agentes infecciosos y, por último, se espera construir y poner en marcha los artefactos que se necesiten según la demanda de las comunidades involucradas y el nivel de contaminación biológica.
“Se trata de un momento muy grato y emocionante e impresiona la regionalidad alcanzada, porque estamos firmando el acuerdo con dos municipios y un consejo escolar”, expresó Peral García, y agregó: “Los investigadores debemos devolver a la sociedad el apoyo que nos brinda para poder desarrollar nuestro trabajo, y uno de los caminos es transferir los conocimientos para la resolución de las problemáticas de la comunidad. Los mecanismos para ello todavía no están del todo aceitados pero estamos comenzando el camino. Hay profesionales como Pablo Arnal capaces de generar soluciones a distintos problemas que atraviesa la provincia, y el tema del agua es uno de ellos”.
Rando destacó que anteriormente ya se establecieron colaboraciones con organismos y entes públicos y resaltó el acuerdo con Magdalena, pero subrayó que estos nuevos convenios “son muy motivadores para seguir avanzando hacia los lugares que requieran las soluciones que el ámbito científico puede aportar. Es un orgullo que el trabajo pueda llegar de primera mano a la sociedad, con una solución simple, directa, y de fácil implementación”.
Por su parte, Arnal graficó que “lo que estamos haciendo es juntar capacidades dispersas. Por un lado, están los municipios y consejos escolares - que son los que tienen la responsabilidad sobre las escuelas y conocen su situación -, por otro, las instituciones públicas que pueden hacer su aporte en el análisis del agua, y además está el CONICET con las variadas posibilidades que ofrecen sus diferentes líneas de investigación para la resolución de problemas. Lograr unir esos puntos sueltos es ir más allá en el desarrollo de una mejor sociedad”.