COOPERACIÓN CIENTÍFICO TECNOLÓGICA

El observatorio que estudia la geología del planeta entra en fase de operatividad total

Se trata del AGGO, un centro de investigación compartido entre el CONICET y la Agencia Federal de Cartografía y Geodesia de Alemania


El equipo del AGGO junto con las autoridades del CONICET La Plata

A partir de la rúbrica de un convenio de cooperación científica tecnológica entre el CONICET y el Ministerio de Defensa de la Nación (MINDEF), el Observatorio Argentino-Alemán de Geodesia (AGGO, por sus siglas en inglés) comienza su segunda y más importante fase: la de operatividad al 100 por ciento de todos sus instrumentos. El acuerdo, firmado días atrás, comprende la incorporación de siete personas que serán entrenadas para manejar los sofisticados equipos en turnos rotativos para cubrir 24 horas por día ininterrumpidamente.

Surgido como iniciativa conjunta entre el CONICET y la Agencia Federal de Cartografía y Geodesia de Alemania (BKG, por sus siglas en alemán), el observatorio funciona desde 2015 a 800 metros del Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR, CONICET-CICPBA), en el Parque Pereyra Iraola a la altura de la localidad de Berazategui. Se trata de un instrumento geodésico dentro del Marco de Referencia Terrestre Internacional, una red mundial que soporta la infraestructura de datos espaciales y contribuye a monitorear los procesos tectónicos y de cambio global.

Su misión es medir, registrar a largo plazo y poner a disposición de la comunidad científica internacional una variedad de señales geodésicas necesarias para entender los procesos de deformación de la tierra sólida, de la superficie de los océanos; las variaciones espaciales y temporales del campo de gravedad del planeta; su rotación en el espacio; entre muchos otros procesos geodinámicos y de cambio global que afectan al sistema.

“La primera etapa, pensada desde que surgió el AGGO como proyecto, consistió en poner en funcionamiento todos los instrumentos, algunos de ellos muy complejos. Eso ya finalizó, y la segunda fase es operarlos, para lo cual ya sabíamos que sería necesario contar con más personal”, relata Claudio Brunini, investigador principal del CONICET y coordinador científico general del observatorio. Esa demanda fue la que impulsó el actual convenio, que precisamente permitirá el ingreso de siete nuevos agentes.

Los futuros operarios son técnicos que actualmente se desempeñan en organismos dependientes del MINDEF tales como el Instituto Geográfico Militar (IGN), el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y el Servicio de Hidrografía Nacional (SHN), instituciones que a su vez se benefician desde hace tiempo con los datos generados por el observatorio. “Se hizo una convocatoria para personas con un perfil apropiado y que vivieran por la zona de La Plata, Villa Elisa o City Bell, y aparecieron muchos interesados, porque el observatorio de geodesia es realmente un lugar muy atractivo para aprender y trabajar”, cuenta Brunini.

Si bien gran parte de los instrumentos que funcionan en el AGGO son automáticos y requieren poca intervención humana, otros como el radiotelescopio y el telescopio láser necesitan un monitoreo permanente los siete días de la semana, y hasta el momento venían siendo operados de manera parcial y en horarios restringidos, precisamente debido a  la falta de recursos humanos. “Comienza una etapa muy desafiante, en parte porque crece el grupo de trabajo y tendremos que incorporar al nuevo personal a la rutina diaria, y porque enfrentamos la fase de operatividad al 100 por ciento de nuestro centro de investigación”, concluye el científico.

La firma del convenio estuvo encabezada por el presidente del CONICET Alejandro Ceccatto y el secretario de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa del MINDEF, Luis Riva. Del acto también participaron Brunini y el director de AGGO, Hayo Hase, junto a otros representantes de distintas áreas del organismo de ciencia nacional y de las Fuerzas Armadas.