Mediante una encuesta buscan medir cómo repercute la pandemia en los adultos mayores

La incertidumbre ante el avance del COVID-19, su tasa de letalidad e incidencia en la población, sumadas a los factores adicionales como la amenaza que supone la enfermedad tanto en relación con el riesgo de contagio de personas queridas o la posible saturación del sistema de salud pública, como los problemas laborales y de ingresos individuales y su impacto en la economía nacional, se configuran, según los expertos, como una fuente de elevado estrés psicosocial.

Desde esa perspectiva, un equipo de investigadores del CONICET en la Unidad Ejecutora de Estudios en Neurociencias y Sistemas Complejos (ENyS, CONICET-UNAJ-HEC) se propuso evaluar de qué manera esto repercute en la población, en particular en los adultos mayores. Es así que el grupo de Envejecimiento Saludable y Demencias del mencionado centro de investigación preparó una encuesta pública para medir la percepción del miedo y la ansiedad que provoca el COVID-19.

El objetivo del equipo es relevar la respuesta de miedo frente al peligro y el impacto emocional en sujetos jóvenes, adultos y adultos mayores, evaluar la percepción del tipo y grado de miedo (a contagiarse, a contagiar, a perder los recursos o al aislamiento) y comparar la adhesión a las conductas de cuidado. Según su hipótesis, “pese a que los sujetos mayores son más vulnerables al COVID-19, muestran menor o igual nivel de miedo que el resto de los rangos etarios, y sus acciones preventivas no varían significativamente y se exponen de forma similar al contagio”.

Para responder a la encuesta se deberá completar este formulario.