Autoridades del CONICET visitaron un centro que estudia la geología del planeta

Los directores del Centro Científico Tecnológico CCT CONICET La Plata, Pilar Peral García y Martín Vila Petroff, fueron invitados al Observatorio Argentino–Alemán de Geodesia (AGGO, por sus siglas en inglés), una institución surgida por convenio entre el CONICET y la Agencia Federal de Cartografía y Geodesia (BKG) de Alemania. Junto a su titular e investigador del CONICET Claudio Brunini, recorrieron el predio y conversaron acerca de la planificación de actividades para 2019, con énfasis en la realización de un evento para celebrar los 50 años del primer convenio entre ambos países.

Inaugurado en 2015, el observatorio está ubicado a 800 metros del Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR, CONICET-CICPBA), en el Parque Pereyra Iraola a la altura de la localidad de Berazategui. Se trata de un instrumento geodésico dentro del Marco de Referencia Terrestre Internacional (ITRF, por sus siglas en inglés), una red mundial que soporta la infraestructura de datos espaciales y contribuye a monitorear los procesos tectónicos y de cambio global.

AGGO tiene la misión de medir, registrar a largo plazo y poner a disposición de la comunidad científica internacional una variedad de señales geodésicas necesarias para entender los procesos de deformación de la tierra sólida, de la superficie de los océanos; las variaciones espaciales y temporales del campo de gravedad del planeta; su rotación en el espacio; entre muchos otros procesos geodinámicos y de cambio global que afectan al sistema.

Durante el encuentro, las autoridades evaluaron algunas obras menores pendientes, como así también delinearon acciones futuras para llevar adelante de manera conjunta con la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CICPBA) y la cartera bonaerense de Ciencia, Tecnología e Innovación. Por lo pronto, se proyecta la celebración del cincuentenario de la firma del primer convenio de cooperación científica entre Argentina y Alemania, uno de los acuerdos bilaterales más antiguos que tiene nuestro país y que ha dado marco, entre muchas otras iniciativas, a la creación del AGGO.